Llamando la clientela. Montevideo. Barrio Cordón. Foto de autor. |
EL JUEGO DE AZAR. Fantasías de la probabilidad y el azar.Siempre irresistible
Desafiar a la suerte, a la diosa mujer Fortuna para los romanos y para los griegos Tyké, parece ejercer una fascinación irresistible
para el ser humano. Se le encuentra conceptualmente sea de forma explícita u oculta, en todo el comportamiento de los humanos en el desarrollo de su vida cotidiana. Basta pensar unos instantes y nos encontraremos con ella en nuestros propios comportamientos. Apostamos muchas más veces de las que nos damos cuenta. Y la cultura postmoderna nos ofrece múltiples opciones para
ello.
No es necesario traslados a escenarios tan específicos como casinos o pasar una tarde en el hipódromo. Basta con ingresar en un
quiosco del barrio para encontrar maquinitas donde introduciendo una moneda se pueden intentar ganar algo. Porque de eso se trata, jugar para ganar.
Podemos encontrar juegos de azar en Internet y participar desde pantallas luminosas y mouses.
Estos tiempos electrónicos pone al alcance de todos
–chicos y grandes- la posibilidad de apostar a la fortuna. Es más, nos
estimula e incita a hacerlo para cambiar la vida mediante un golpe de la
suerte. Slots, maquinistas, bingos, quiniela, lotería, ruleta… en un entorno de
música y luces que atraen y seducen.
También sabemos que lo que para muchos
representa un redituable negocio, apareja la ruina y esclavitud para esos otros, los
“ludópatas”, adictos que no pueden ya vivir sin apostar. Era , nos parece, necesaria esta acotación y breve introducción.
El origen
del juego de la Quiniela en Uruguay se remonta a 1939 cuando el Estado, tras
fracasar en dos intentos, crea y asume el desarrollo y control de un sistema de concesiones "único en
América Latina" en cuyos resultados
participaba a través de impuestos. Más adelante, al comenzar la década de 1970
se sancionó la ley que rige el funcionamiento de la Banca de Quinielas y en
1979 se aprobaron sus Estatutos. También el azar de la crisis económica regional que recaló duramente
en el país en 1982, desembocó
en la sanción de la Ley 15.716, que dierpm nacimiento a nuevas formas de apostar con la incorporación de nuevos juegos derivados de
la quiniela. Así se lanzó la Tómbola (1985), el Cinco de Oro (1990) y Lotería
instantánea (1999).
Breve RESEÑA HISTÓRICA:
Corría el año 1817 y estas tierras aún sin independizar soportan con poca
resignación la dura dominación portuguesa y Montevideo recibe al Gral. Carlos
Federico Lecor Vizconde la Laguna, como administrador colonial portugués. Es
entonces que en 1818 y con el propósito explícito de solucionar problemas
sociales relacionados directamente con el sostenimiento de los Niños Expósitos
y el mantener funcionando el Hospital de Caridad, que dicho alto jerarca
resuelve instalar en todo el país los juegos de Lotería.
El primer sorteo documentado
se llevó a cabo el día 9 de Julio de 1819, en la entonces Plaza Mayor, hoy Plaza Constitución y popularmente conocida como
Plaza Matriz, frente mismo a las Puertas del Cabildo.
En esos sorteos se
distribuían en premios la cantidad de 750 patacones, con un Premio Mayor de 200
patacones y un total de 48 suertes premiadas.
El precio de las cédulas, que así se
dominaban en la época los documentos que permitían participar en los sorteos,
era de un “real” la participación o
fracción en la que se dividía el entero que constituían los 8 millares que se
emitían, y se comercializaba en la vía pública por intermedio de vendedores
ambulantes, que respondían al nombre de Loteros, denominación que en cierto
modo perdura.
La fecha de los sorteos eran fijadas una vez agotada la totalidad de la
emisión lanzada a circulación, y el acto se realizaban forma público generalmente en la
puerta del Hospital de Caridad. Daban fe dela correción y ajuste en los formalismo, un Juez y un Escribano.
Pasaron algunas décadas y el 1º de abril de
1889 encontramos a la la Lotería con
Sede en el actual edificio de la calle
Cerrito 220, entonces Nª97.
La sede que hoy ocupa el Organismo fue
construida por los arquitectos Cassasopra y Zanetti, de acuerdo a los planos
del arquitecto italiano Juan Tossi. La misma fue inspirada en la arquitectura
renacentista. En su majestuosa fachada de dos pisos llaman la atención las
hermosas rejas de la planta baja, las que son reticuladas formando rombos, y
semejantes a las que existen en los palacios de Milán, Vicenza y Verona.
NACE LA LOTERÍA : Su nacimiento data del 12 de
Julio de 1856, fecha en la que promulgó el precepto legal al que había de
ajustar su funcionamiento la actual Dirección Nacional de Loterías y Quinielas.
El decreto de ley 510, declara que las Loterías
Públicas son pertenencia exclusiva del Hospital de Caridad.”
El 15 de octubre de 1882 iniciaron su
funcionamiento los tradicionales globos que fueron construídos por la firma
“Marchal, Carminatti y Paccard” .
El 1 de abril de 1889 se Inauguro el actual
edificio de la calle Cerrito Nº 220, entonces Nº 97, donde hasta hoy se
realizan los sorteos de Loterías y Quinielas, el que fue inaugurado por el
Presidente de la República, Gral. Máximo Tajes y otras autoridades.
Por ley del 20 de Julio de ese mismo año, se
nacionalizo el Hospital, que hasta ese entonces, era Municipal y paso a la
órbita Ministerial, encomendando a la Comisión de Caridad y Beneficencia
Pública la Administración de la Lotería.
En el año 1909 la Lotería inauguró su propio
taller Litográfico Tipográfico, comenzando desde entonces, en forma
ininterrumpida, a imprimir los billetes que emite, así como los Extractos
Oficiales de los Juegos de Loterías, Quinielas, y el resto de los juegos
administrados por esta Dirección.
El 24 de Agosto de 1910, en oportunidad de
sortearse una Lotería extraordinaria se inauguro la cabina que protege los
globos, siendo realizada en la Escuela Nacional de Artes y Oficios, para
amortiguar el enorme ruido producido por el golpeteo de las bolillas”. Los cristales
(de origen belga) que conforman la “vidriera” nunca fueron cambiados hasta el
presente y tienen 1 cm de espesor y casi 3 metros de altura.
Para la década del 20, la Lotería se sorteaba 2 veces por semana, los martes y los sábados.
En esos años, y en los siguientes, los billetes de nuestra Lotería se vendían en el país y también en Buenos Aires, Asunción, Río de Janeiro, San Pablo, Santos y Pelotas.
Este hecho económico era de real importancia, ya que oportunamente se impartieron instrucciones a los Cónsules y Vice-Cónsules en el extranjero a efectos de recibir de los Agentes de Lotería, los billetes no vendidos y que por tal motivo eran devueltos a la Institución. Dichos funcionarios recibían los billetes antes de la fecha dada como comienzo del sorteo respectivo.
En el año 1953, la Administración de Loterías
y Quinielas, quién dependía hasta ese entonces del Ministerio de Instrucción
Pública y Previsión Social, pasa a depender del Ministerio de Hacienda lo que
hoy es Economía y Finanzas.
El 7 de Julio de 1939, se realizo el primer
sorteo de Quinielas, en Montevideo y el 2 de Setiembre del mismo año en el
Interior del País..
En una primera instancia se realizaban
sorteos por separado para Loterías y Quinielas, que con el correr del tiempo se
unificaron en uno solo.
El juego de Quiniela consiste en efectuar apuestas a la última cifra, dos últimas cifras y tres cifras sobre un total de mil números correspondientes a una secuencia comprendida entre el 000 y el 999, como así también apuestas combinadas, conocidas con el nombre de Redoblona, a dos números de dos últimas cifras cada uno. Las apuestas se realizan por un monto determinado de dinero a uno o varios premios, de un total de veinte, comprendidos entre un primero y un vigésimo.
En las apuestas a varios premios, el monto apostado se dividirá en cantidades iguales entre los mismos para poder liquidar los aciertos que eventualmente se generen en ellas. Los veinte números que determinan aciertos son resultado de un sorteo que determina también el orden que cada uno de ellos ocupa. Los aciertos se producen en los casos en que los números jugados estén comprendidos dentro de la cantidad de premios a los que han sido apostados. Así por ejemplo un número apostado a los siete premios, tendrá acierto en el sorteo en que participa si resulta comprendido entre los números sorteados entre el primer y séptimo lugar.
En casos de aciertos, las apuestas efectuadas a la última cifra generarán premios equivalentes a siete veces lo apostado, a las dos últimas cifras setenta veces lo apostado y a tres cifras quinientas veces lo apostado. En las jugadas a Redoblona los montos a apostar sólo se harán al primer número que las componen.En dicha modalidad, el segundo número no podrá ser jugado a un premio anterior al quinto.
Para obtener premio en esta modalidad, deberán acertarse los dos números jugados. En las apuestas a Redoblona, el monto de acierto correspondiente al primer número pasará a jugar automáticamente como monto de apuesta al segundo. Los montos correspondientes a aciertos de apuestas efectuadas a varios premios, serán el resultado de dividir los montos apostados por la cantidad de premios a los que los números juegan respectivamente, aplicado como apostado al primer premio. En caso de repetición de números sorteados, se pagarán por concepto de aciertos de jugadas simples efectuadas a una, dos y tres cifras, tantos montos como veces estén comprendidos los números jugados entre los premios a los que han sido apostados.
En las Redoblonas, la ganancia se acumulará, en los casos de repetición del segundo número apostado hasta el máximo de 1.000 (mil) veces el monto de la apuesta referida al premio, si el acierto producido supera ese monto. En las jugadas de varios premios a varios premios si se repitiera el primer número apostado, se liquidarán hasta tantos máximos como veces salga, en la medida que sea necesario aplicarlo por repetición, también del segundo número apostado. De repetirse solamente el primer número se liquidarán tantas redoblonas simples como veces haya salido sorteado. Se entenderá por monto de apuesta referida al premio el que surja de dividir la cantidad apostada a varios premios entre esos mismos premios.
La Quiniela. Como se juega
El juego de Quiniela consiste en efectuar apuestas a la última cifra, dos últimas cifras y tres cifras sobre un total de mil números correspondientes a una secuencia comprendida entre el 000 y el 999, como así también apuestas combinadas, conocidas con el nombre de Redoblona, a dos números de dos últimas cifras cada uno. Las apuestas se realizan por un monto determinado de dinero a uno o varios premios, de un total de veinte, comprendidos entre un primero y un vigésimo.
En las apuestas a varios premios, el monto apostado se dividirá en cantidades iguales entre los mismos para poder liquidar los aciertos que eventualmente se generen en ellas. Los veinte números que determinan aciertos son resultado de un sorteo que determina también el orden que cada uno de ellos ocupa. Los aciertos se producen en los casos en que los números jugados estén comprendidos dentro de la cantidad de premios a los que han sido apostados. Así por ejemplo un número apostado a los siete premios, tendrá acierto en el sorteo en que participa si resulta comprendido entre los números sorteados entre el primer y séptimo lugar.
En casos de aciertos, las apuestas efectuadas a la última cifra generarán premios equivalentes a siete veces lo apostado, a las dos últimas cifras setenta veces lo apostado y a tres cifras quinientas veces lo apostado. En las jugadas a Redoblona los montos a apostar sólo se harán al primer número que las componen.En dicha modalidad, el segundo número no podrá ser jugado a un premio anterior al quinto.
Para obtener premio en esta modalidad, deberán acertarse los dos números jugados. En las apuestas a Redoblona, el monto de acierto correspondiente al primer número pasará a jugar automáticamente como monto de apuesta al segundo. Los montos correspondientes a aciertos de apuestas efectuadas a varios premios, serán el resultado de dividir los montos apostados por la cantidad de premios a los que los números juegan respectivamente, aplicado como apostado al primer premio. En caso de repetición de números sorteados, se pagarán por concepto de aciertos de jugadas simples efectuadas a una, dos y tres cifras, tantos montos como veces estén comprendidos los números jugados entre los premios a los que han sido apostados.
En las Redoblonas, la ganancia se acumulará, en los casos de repetición del segundo número apostado hasta el máximo de 1.000 (mil) veces el monto de la apuesta referida al premio, si el acierto producido supera ese monto. En las jugadas de varios premios a varios premios si se repitiera el primer número apostado, se liquidarán hasta tantos máximos como veces salga, en la medida que sea necesario aplicarlo por repetición, también del segundo número apostado. De repetirse solamente el primer número se liquidarán tantas redoblonas simples como veces haya salido sorteado. Se entenderá por monto de apuesta referida al premio el que surja de dividir la cantidad apostada a varios premios entre esos mismos premios.
Tomamos del trabajo del Profesor Renzo Pi Hugarte, Facultad de Humanidades de la Universidad de la República Uruguay:
Elementos de la cultura italiana en la cultura del Uruguay
[...] "He aludido a otras influencias italianas y quiero por eso referirme a
cuestiones que tienen más que ver con los aspectos ideológicos de la cultura. Así,
en el orden de la eterna espera de lo que el azar puede proporcionar a las vidas grises
y económicamente apretadas de la gente del pueblo, una de las grandes pasiones lúdicas rioplatenses, con su carga de esperanzas, tiene origen en la Italia del
sur; me refiero a la quiniela. Adherido a la imprevisible aparición de los números
sorteados, persiste la creencia de que los sueños anticipan de manera metafórica, velada y
críptica, las cifras que habrán de ser ganadoras en la siguiente oportunidad. Sin embargo, es
necesario saber interpretar los significados de las imágenes oníricas de acuerdo
con fórmulas antiguas que expresan esas equivalencias y cuyo sentido resulta a menudo
arbitrario.
Para ello se utilizan las smorfie, sobre todo, las napolitanas.
Estas tablas indican, por ejemplo, que si una persona sueña con un muerto, deberá jugar al 47;
y si ese muerto habla en su sueño, al 48. También esas listas con las
correspondencias entre los motivos soñados y los números a ser jugados a la quiniela son
denominadas con su nombre italiano acriollado: esmorfia.
Hay empero una
alteración en las tradicionales listas italianas producida por el culto a un santo también italiano que
es el que mayor número de devotos convoca entre todas las manifestaciones del
catolicismo popular en el Uruguay: San Cono; cuyo número es el 03, por ser ese día
de junio en que murió, según lo aseguran los relatos agiográficos, fecha en la
que tiene lugar su multitudinaria celebración.
Claro que la suerte tiene su contrapartida en la mala suerte, en la “yeta”,
forma españolizada a la rioplatense de la idea de jettatura, que hay
que esquivar como se pueda, porque hay situaciones que la provocan e individuos que resultan
invencibles “yetatores”. (Cierto es que actualmente, estos términos han caído en
desuso, siendo sustituidos por otro italianismo difundido desde Buenos Aires: “mufa”,
del italiano muffa que significa moho: alegoría referida a que la mala
suerte enmohece el espíritu y la vida.
No obstante en tiempos anteriores, la idea de la “yeta” tuvo
gran predicamento y hasta el célebre comediógrafo argentino Gregorio de Laferrere
-1867-1913- obtuvo un señaladísimo éxito con su obra “¡Jettatore...!”, acaso paralela a la canzonetta napolitana “di attualitá” de igual título, con música de V. Valente y
versos de P. Cinquegrana. Tal vez no resulte ocioso recordar que uno de los
personajes de historietas más populares del Río de la Plata, fue “Fúlmine”, temible “yetatore”
creación del dibujante
Divito difundido por la revista de Buenos Aires “Rico Tipo” [...]
Lo que me gustaría saber es la escala del 1 al 7 de la tómbola en el año 1985 cuanto cobra si salen 5numeros
ResponderEliminar¿cuanto saco 5en7 a la tómbola en el año 1985?que no recuerdo gracias.
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