Salar de Uyuni. Uno de los yacimientos de litio más grande del mundo. Foto: Yael |
La tierra y su gente , que hoy conocemos como Bolivia , gozan quizá como ninguna otra región americana, del triste privilegio de haber sido victimizada tanto por la codicia de propios como de extraños. Primero fue el europeo, conquistador etnocida cubierto de metal , que a caballo en su codicia sin límites casi que logra a pura sangre, catecismo y fuego, no dejarle al Otro que encontrara en el contacto ni tan siquiera el alma. Luego vendrían otros tiempos de luchas quizás inevitables en la dialéctica de poderes e intereses de la época, esta vez doble dolor, por muertos propios y por ajenos , pueblos hermanos en cultura y sangre, cordillera y llanura, de acá y acullá los Andes. Los siglos post coloniales XIX y XX fueron a Bolivia tiempos de guerra, de destrucción y pérdida. Pura pérdida. Tiempos de sangrientas luchas fratricidas, teñidas de rencores solapando inconfesables afanes de conquista .
Hermanos americanos unidos en el beneficio de las aguas bienhechoras del Océano Pacífico , que hubo de ceder , quiero pensar que regañando y en disgusto, su nombre de paz para la guerra, y allí, pobre noble Bolivia de armas presuntuosas, le quitaron a filo de acero su mar y parte enorme de su cultura inmaterial incrustada en su ancestral cosmovisión mágico religiosa. Así también , así de igual, pecho frente a pecho, casi que abrazados de tan próximos , decenas de miles de bolivianos y paraguayos, mestizos y cholos, aymaras y guaraníes, quechuas y aché, ensangrentaron las selvas del chaco en guerras invisibles y sin gloria. Solamente se moría, se pudrían y se enterraban unos y otros en la hojarasca húmeda de la selva lluviosa .
También desde el gigantesco Brasil y de la Argentina enorme, llegó el acero amenazante . Ni el Perú ni el Chile tampoco descansaron. En fin , de una manera u otra, todos. La dejaron sola en el techo del mundo , librada al azar, sin puerta de salida a la vida , poblada de indios en penas antiguas y en la incertidumbre existencial de buscar y no encontrar dioses perdidos. Todo esto no hace demasiado tiempo. Las cicatrices, de cierto todavía están. Aún cuando no son visibles al momento de tanta foto, de tanta gente, de tanto presidente, en tanta reunión, en tanta charla americanista y en tanto parloteo de hermandad latinoamericanista. Que quizá no tengan presente a Hernández y su Martín Fierro, que por las dudas, les recuerdo, dijo fuerte , con voz clara..."los hermanos sean unidos esa es la ley primera"... sino se lo comen los de afuera. Ya lo hicieron. Saben entonces como hacerlo.
Reflexiono en la pena que para esta América de historia triste estas cosas significan . Vuelvo la mirada a los sueños libertarios de Tomás Katari, de Tupac Amaru y Tupac Katari. Pienso en Bolívar, fundante de la nación que hoy se honra con su nombre y redactor de su primera Constitución, que opinaría hoy de tanto discurso utilitario y fáctico , en los cuales su nombre suena una y mil veces en pretensión legitimadora y legitimante de nuevos tiempos, nuevos intereses, nuevas codicias. ¿Qué pensaría Simón el llanero inolvidable e impenitente, el Libertador , mirando hoy a su Bolivia bicentenaria?
A un buen y querido uruguayo , que ama entrañablemente a esa sufrida, marrón , querible Bolivia, le debo y agradezco el haberme noticiado de este video de la Feria de Kantuta , que me lo enviara y que quiero compartir con ustedes en esta página . También le debo y agradezco la foto del salar de Uyuni de su autoría. Va de mí, enfrentar en contraste con ese testimonio elocuente de cruda realidad de lucha por sobrevivir del pueblo boliviano, con otra realidad, ésta de cara frívola y alma aculturada, que desde la pura racionalidad no logro entender por más que me interrogo, a título de qué, por y para qué, se excitan en el deseo de ser parte del mundo blanco , sea esto lo que fuere, que no importa , pese al fuerte discurso hegemónico y dominante que intenta desde lo teórico negar su existencia , cuando la realidad que siente y la piel lleva , dice lo contrario.
Me encomiendo a Ekeko, divinidad aymara de la abundancia y prosperidad, y le solicito conceda a Bolivia estos bienes que de hecho y derecho la gran nacion andina merece. |
Dejo estos videos y fotografías testimonios a la reflexión y crítica de ustedes , los que se me ha ocurrido titular y compaginar de la forma siguiente:
1 - Bolivia y la cultura de la estrategias de vida :
La feria de Kantuta
2- Bolivia y la aculturada sensualidad de los satenes , las sedas y la estética exótica del cuerpo femenino devenido mercancía de placer :
Feria de misses, de frivolidad , de vanidades y mercado.
3 - Bolivia y la discreta esperanza: La nueva realidad del vecindario y zonas aledañas
Los líderes. Que quiero creer han leido con atención la historia de estas tierras. Los que hoy tienen en sus manos tanta cosa por hacer, que de tanto decir y de tanto dichas, por repetidas se nos hacen desde que lo parecen , imposibles. También desde ahí se construyen discursos de dominación. En Bolivia , La Paz, el Presidente Evo e invitados celebran el Bicentenario de Bolivia. |
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Muy bueno Julio!! en texto y en contexto, Bolivia única e intransferible; formando parte de este círculo universal eterno de paradojas. Abrazo. Adelaida
ResponderEliminarEstimado Adelaida: muchas gracias por la generosa opinión. Bolivia en particular y lo andino milenario en general, más pronto que tarde llegará el tiempo que se le estime y valore en la riqueza de su cosmovisión y en la fuerza de su cultura, opción de mirada quizás para esta modernidad que desvanece en su desencanto y agoniza en su banalidad. un abrazo. Gracias por la compañía.
ResponderEliminarAyer creo fue que conocí tu blog y tras leer este texto y su contexto como diría Adelaida, me volví seguidor de él.
ResponderEliminar¡Qué le han hecho a Nuestra América!
Como decís, los de afuera han aprendido muy bien y por los cuatro costados el acero penetró a Bolivia pero creo que aunque historia triste la de Nuestra América, es una tristeza que no paralisa, que no evitará jamás seguir levantando las banderas de lucha de Tomás Katari, de Tupac Amaru, Tupac Katari y de Bolivar. Este maravilloso país, que hace años sueño conocer, sabe de luchas y sigue, con contradicciones, luchando. Lo puso de manifiesto en el 52, la mejor oportunidad perdida y hoy con Evo, que aunque uno quisiera que haga mucho más necesitaría que los demás países de Nuestra América se recuentren con las palabras de Fierro y sean más inteligentes y prudentes.
Estimado Juan Manuel: Muchas gracias por tus comentarios y por sumarte a seguir este humilde proyecto que solamente intenta hacer fronteras y distancias cada vez más accesibles y desde su uso, darle a la tecnología la oportunidad de que se honre en el cumplir su único fin - por supuesto pervertido mil veces en la historia- aportar bienestar a la especie y haciéndonos cada vez más concientes de la responsabilidad social de habitar en arriendo este planeta no adjudicado en propiedad a nadie y que es de todos. Me identifico con las particularidades de tu perfil, con tu valiente bicicleta y van los afectuosos saludos a Roma compañera que viaja contigo por la vida. Un gran abrazo oriental, diría borges. Espero sigamos en contacto. Julio
ResponderEliminarChe, muchas gracias por tus palabras y por supuesto que mantendremos el contacto.
ResponderEliminarNos leemos...
Juan Manuel: Mucha suerte por ahí. hasta pronto. abrazo. julio
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